El CB Andújar Jaén Paraíso Interior obtiene un abultado y convincente triunfo ante Colegio Pinar en su estreno liguero, 95-68

El CB Andújar Jaén Paraíso Interior cumplimentó este sábado su primer compromiso oficial de EBA en esta tormentosa temporada con un triunfo convincente y coral ante Colegio el Pinar, 95-68, que se fraguó en el primer cuarto con un 32-14, que permitió a los andujareños redondear la abultada victoria ante un atildado y aseado conjunto visitante, que se vió atropellado por el ímpetu de un conjunto local que dejó buenas vibraciones al conjugar la experiencia y sabiduría de Berni Castillo y Dani 'Chacho' Muñoz y el paso adelante que certificaron jóvenes valores de la prolífica cantera iliturgitana como Jaime Pérez, Javi Martínez y Carlos García, perlas que ya dan visos de estas puliéndose para gozo del equipo andujareño que no se pudo ver arropado por su público.

El regreso de Ángel Vázquez, el fichaje del techo del equipo, el americano Thiep, hicieron olvidar en el partido inaugural las reseñables ausencias de José Martínez, Jorge Rodríguez y el inagotable Suka. El poderío y el ritmo vertigonoso que marcó Ángel Vázquez, dibujaron el devenir del choque, ya que con su espíritu brigadista y espartano espoleó al CB Andújar y atornilló el colegio El Pinar, equipo dotado de fundamento que se vio cegado por el ímpetu de los locales, que bailaron al son de Vázquez, máximo anotador del choque, que no incrementó su cuenta por el fallo en el tiro libre.

El acierto de Jaime Pérez en el tiro (un derroche de entrega y espíritu) y de Carlos García (base con calidad y desparpajo, que solo se precipitó en algunas acciones) y la clase que atesora Javi Martínez ( que le permitió estar en la órbita de la Selección Española Cadete) mantuvieron al equipo ante los arreones de los visitantes, que estuvieron sostenidos por Moreno Morales. Y ante la fogosidad de los jóvenes andujareños, el aplomo y sabiduría de Berni Castillo y Dani Muñoz irrumpieron en los momentos más señalados del choque para abrillantar y pulir un triunfo esperanzador en medio del desasosiego del virus que amenaza con todo lo que se le ponga por delante.