SAFA Andújar dará cabida a los ciclos formativos, pese al fuego virulento

La jefa de Estudios de SAFA-Andújar, Ana Belén Solás, indica que desde la misma tarde del incendio la dirección central de la Escuelas Profesionales de la Sagrada Familia, con sede en Sevilla, -concretamente la Compañía de Jesús-, empezó con las gestiones oportunas. El viernes día 2 de agosto, se reunió todo el equipo directivo de la SAFA de Andújar, donde se abordaron las directrices y soluciones que les plantearon desde Sevilla

La directora-gerente de la SAFA en Andújar, Manuela Díaz, fue la encargada de transmitir todas las pautas que se han ido concretando durante todos los días del mes de agosto. La comunión entre los responsables de Sevilla y Andújar ha sido total. «El mismo viernes día 2 de agosto ya se definió donde se iban a reubicar a los alumnos y las aulas portátiles», señala Solás. Estas aulas portátiles se denominan caracolas. En total, se van a ubicar cuatro en las mismas dependencias de la SAFA. Incluso, en la sede de Linares se van a impartir clases prácticas.

Tarea ardua

La misión entrañaba su dificultad, porque se quemó todo el material de los grados de Instalaciones Eléctricas, Robótica Industrial, Sistemas Informáticos en Redes y Electromecánica. Un total de 200 alumnos cursan especialidades. También ardió el gimnasio, que acababa de rehabilitarse . El torneo de feria de Tenis de Mesa de SAFA se va a celebrar en el pabellón deportivo del centro educativo. «Las gestiones han sido constantes y diarias, porque han venido peritos, policía científica, se han pedido presupuestos, hemos mantenido un contacto con los seguros y se han entablado encuentros con empresas de la ciudad para que los alumnos hagan sus prácticas», afirma Solás.

A la espera de la construcción de un edificio nuevo, el alumnado empezará sus prácticas el día 16 de septiembre. Ana Belén destaca el apoyo que le están brindando las administraciones y los centros educativos de la ciudad. El mismo profesorado y alumnado se ha ofrecido para la reubicación de las aulas. El jueves 1 de agosto se declaró el fuego, que afectó a más de 2.500 m2 de planta. Afortunadamente, no hubo que lamentar desgracias personales. Un operario de una empresa contratista que estaba realizando obras y un miembro del cuerpo de bomberos, fueron atendidos por inhalación de humo.

Sí se produjeron cuantiosos los daños materiales. Las naves en las que se ubicaban los ciclos formativos de Electricidad, Automoción, Informática y Robótica, junto con todos los medios materiales de esos ciclos, sufrieron daños irreparables. También se vieron afectadas otras instalaciones auxiliares del centro y la sede del club de Tenis de Mesa. El resto de ciclos formativos, las etapas de EI, EP, ESO y BACH, así como los edificios administrativos, salón de actos y pabellón, no se vieron afectados.