José Carlos González
Domingo, 14 de mayo 2017, 07:57
Anoche sábado culminó la novena que se profesa todos los años a la imagen de la Virgen de la Cabeza que se venera en la ciudad con la procesión de regreso a la ermita de la calle Ollerías desde la iglesia de San Miguel, donde el nuevo hermano mayor, Ramón Pérez Melero tomó el cetro que le cedió su antecesor, José Antonio Hinojo, a la puerta de la ermita, en una estampa preñada de costumbrismo, declamada por el padre Domingo Conesa, ante la gente que se agolpó en la zona y el balanceo incesante de la Virgen por los anderos y la emoción y sollozos de los protagonistas.
Publicidad
Participaron una decena de cofradías filiales de la Virgen de la Cabeza, las hermandades de la ciudad, junto con representantes de la Corporación Municipal en un final frenético y solemne, donde hubo fuegos artificiales.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.