Radiante procesionar de las cofradías en el Jueves Santo

Como estaba previsto, la jornada del Jueves Santo relució bajo un sol esplendido en el que los templos se llenaron de fieles para asistir a los santos oficios. Una climatología que acompaña en esta ocasión y que los vecinos de Andújar y de toda la comarca han aprovechado para vivir con mayor intensidad en la calle la Semana Santa iliturgitana.

IDEAL Andújar

Miércoles, 11 de mayo 2016, 08:54

 

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A media tarde los primeros sones de las banda de cornetas y tambores "El Amarrado" de Úbeda y la Agrupación Músical "Reina de la Amargura" de Jaén se dejaban oír por las calles del centro de la ciudad de Andújar. La primera acompañaba a un Cristo de la Sentencia solitario en su paso, por decisión de la nueva junta de gobierno, hasta tanto sea de mayores dimensiones para poder albergar el resto de las figuras que han llegado a integrarse en este paso de misterio. La banda de la capital acompañaba a María Santísima del Buen Remedio, que también dejaba notar las directrices de esta nueva junta de gobierno. Así, la magnífica talla del sevillano Dubé de Luque, volvió a vestir la saya de salida primitiva con la que fue bendecida realizada por Concepción Anguita que ha sido restaurada para la ocasión. El adorno del palio también recuperó este año en la candeleria las "velas rizás" tan características de este paso y que fue la pionera en utilizarlas en la Semana Santa iliturgitana. En su llegada a la Plaza de España, y antes de su entrada a tribuna, los costaleros mecían el paso a los sones de "Suspiros de España" sorprendiendo a quienes llenaban el lugar.

Poco tiempo después, ese mismo lugar se vería abarrotado a la espera del Gran Poder. Majestuoso e impresionante, como cada año, atravesó su capilla en la puerta lateral de la iglesia parroquial de San Miguel, para llenar con su presencia la Plaza de España. Con una sublime chicotá de sus hermanos costaleros hacía su paso por tribuna. Un total de 203 hermanos, entre acólitos, ciriales, nazarenos, costaleros y cuerpo de capataces componían el cotejo de la impresionante estación de penitencia, a la que se sumaban los 124 componentes de la Agrupación Musical Pasión de Linares, banda de reconocido prestigio en el mundo cofrade. El transitar tanto por las amplias calles y plazas, como por las más angostas como Maestra o el Carmen fue todo un ejemplo del buen hacer de la cuadrilla de sus hermanos costaleros. El buen tiempo reinante y su nutrido grupo hizo que recuperasen el tradicional itinerario, alcanzando la calle San Francisco y la Plaza Vieja. Regresabó a su sede canóniga entrada ya la madrugada.

Con la caída de la noche volvía a tomar protagonismo la iglesia parroquial de Santa María la Mayor y la plaza donde se ubica Ntra. Sra. de la Esperanza, una de las advocaciones con más arraigo de la ciudad, que hacía su salida a las órdenes de su gran capataz, y por último año hermano mayor de esta cofradía, Gabriel Ramírez Herrera. Acompaña a esta imagen, desde que en 1971 se produjera la fusión con la correspondiente cofradía Ntro. Padre Jesús Caído que, poco a poco, se ha ido convirtiendo en un paso de misterio. Un magnifico paso en fase de construcción portado por 40 hermanas costaleras. La salida y entrada en el templo, así como su transitar por calles de mayor recogimiento, como Pintor Zabaleta, Guadalupe, Maestra o el Carmen, dejaron patente el buen hacer, pericia y la armonía de sus hermanas y hermanos costaleros. Las bandas, de tambores y cornetas "Sones de Pasión" de Cáceres, para el Cristo, y Municipal de Música de Villanueva de Córdoba, para la Virgen de la Esperanza se dejaron sentir hasta bien entrada la noche, asentando el desarrollo cada vez más seguido de la "madrugá" andujareña cuando el tiempo acompaña.

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