Andújar destapa una presunta estafa nacional a 12 imprentas y negocios de diseño gráfico

El inspector-jefe de la Policía Nacional de Andújar, José Mariano Olivares, ha indicado a IDEAL que han sido cinco los dueños de los negocios perjudicados quienes han sido llamados para relatar lo ocurrido. El responsable de esta fuerza de seguridad califica esta presunta estafa como una 'maniobra sofisticada'.

Los responsables de una empresa (ahora a la espera de ser juzgados) ofrecieron las máquinas a las imprentas, para usufructuarlas en régimen de 'renting' o 'leasing', cuyo contrato se formaliza con otra empresa que hace de leasing (o sea de financiera). El ofertante cobraba el total de este 'renting' y los usuarios le abonaron el dinero que contrataron del 'leasing' a la empresa que ya le ha pagado a los ofertantes, quienes son los presuntos estafadores. Además, se estableció un segundo contrato, por el que una vez cubierto el costo por el 'renting', se les ofertó a los 12 negocios la cobertura de un número mínino de copias, el mantenimiento de la máquina y suministro de fungibles, tintas y elementos ópticos, "pero una vez que se ha cubierto el costo del 'leasing', la empresa ofertante no cumple con su compromiso de mantenimiento y de abastecimiento de material, y se demuestra que la máquina es diferente a la que ofrecieron en un principio, por lo que, -aclara Olivares- se ha engañado a las imprentas y a la empresa del 'renting' (financiera), que ha hecho el contrato de una máquina que en realidad es otra". Los cálculos apuntan a que cada imprenta ha podido perder 20.000 euros.

Como un coche trucado

Uno de los empresarios perjudicados, el editor andujareño Pablo Utrera (en un principio la denuncia la formuló su hijo) dice sentirse engañado y confía en que la Justicia lo aclare, "la máquina que nos ofrecieron no coincidía con el contrato del leasing', es como si compras un Mercedes y cuando vas al taller te encuentras que está trucado porque tiene el chasis cambiado".

Añade que en estos tiempos de dificultades económicas es duro enfrentarse a un pago mensual de una financiara y a una máquina que no te genera ingresos porque está abandonada, "y en manos de gente que no te respetan el contrato, o sea que han cogido el dinero, ni la garantía de arreglo de piezas en los cinco años que estipula el contrato". Precisa que desde el primer mes ya empezaron con engaños, "y se ha visto dañada parte de la industria gráfica de Jaén, Toledo y Ciudad Real". Estas máquinas eran de segunda mano, "pero detrás existía una garantía de arreglo y mantenimiento que no se ha cumplido", indica Utrera.