Indignación por la tardanza de la ambulancia para atender a una accidentada

El sobresalto y la indignación se apoderaron ayer de los vecinos de la calle Maestro Sapena, que se enclava en las inmediaciones de la plaza de toros. Primero vino el susto porque una de sus vecinas más queridas, Emilia, se cayó por las escaleras de la terraza de su casa. Este percance derivó en incomprensión y enfado por la tardanza de la asistencia médica, porque como señalaron vecinos a esta redacción, la ambulancia tardó dos horas en acudir al lugar de los hechos. Decidieron denunciar el hecho, que lo catalogaron de «vergonzoso».

Emilia esperó mientras tanto con dolores en un brazo en la cabeza, en una pierna y en la columna, que la dejaron inmovilizada. Testigos confirmaron que llamaron cinco veces a urgencias del hospital, donde le transmitieron la imposibilidad de trasladar una ambulancia porque las dos estaban ocupadas en «casos graves». Incluso, vecinos, en medio de la desesperación, pidieron, un taxi porque les plantearon la posibilidad de trasladar una ambulancia de Úbeda o de Linares.

Graves deficiencias

Vecinos señalaron que los profesionales sanitarios que por fin llegaron, les pidieron disculpas y reconocieron que les están recortando en medios. Una vez llevada al hospital, se ingresó a Emilia en la Unidad de Críticos, pero como indicaron familiares por precaución, para ser sometida a observación. Por fortuna, todo quedó en un susto, pero ayer los vecinos de la calle y la propia accidentada comprobaron lo que consideraron una deficiencia sanitaria en la ciudad, que pudo desembocar en una desgracia.