La ciudad contará con un nuevo Ministro de la Palabra y la Eucaristía

En el Domingo de la Palabra, establecido por el Papa Francisco, el templo de Santa María la Mayor acogió la ceremonia de Institución de Lector y Acólito, del miembro de esta parroquia Francisco José Cano de Haro.

La Solemne Eucaristía estuvo presidida por el obispo de la Diócesis, Amadeo Rodríguez y estuvo concelebrada por el vicario general Francisco Juan Martínez Rojas, junto al arcipreste y párroco Pedro Montesinos, así como los sacerdotes formadores del nuevo acólito Juan Francisco Ortiz y José Antonio Maroto, y párrocos de la localidad.

El prelado, tras la homilía, procedió, siguiendo el ritual litúrgico, a la ceremonia de entrega del Evangelio y de la patena, signos del ministerio conferido; rito, por otra parte, previo canónicamente para la recepción del Diaconado Permanente. El obispo, durante la homilía, puso de relieve la importancia de dichos ministerios laicales en la vida de la familia y de la Iglesia.

Importancia del día

El pastor de la Iglesia de Jaén destacó que se haya elegido este domingo para administrarlos, justo en esta jornada en la que el Papa Francisco ha querido fuera dedicada a exaltar la importancia esencial de la Palabra de Dios para la comunidad de los creyentes. «Transmitiremos verdadera credibilida cuanto más sostengamos nuestra vida eclesial en la fe y la Palabra…. Cristo, Palabra encarnada y misionero de la voluntad del Padre, es el fundamento espiritual para hacer visible el Reino de Dios», indicó Amadeo Rodriguez en este contexto de tomar conciencia de la importancia del Verbo hecho vida en la vocación ministerial de los bautizados. Como es habitual, la parte musical estuvo a cargo del coro parroquial. El templo se llenó lleno de feligreses, ocupando un lugar preferente sus padres Manuel y Adela; esposa Yolanda Garrido y sus hijos Yolanda y Francisco José.

Entre los asistentes se hallaban profesores del colegio Madre del Divino Pastor, en el que ejerce como tal, de las cofradías con sede canónica en la parroquia, miembros de la comunidad parroquial, amigos y feligreses en general.

Tras la institución de lector y acolito, ocupo su lugar en el altar mayor. Repartió la Comunión y tras ser bendecidas, por parte del prelado las ediciones bíblicas de los feligreses, una vez terminada la celebración, recibió la felicitación de todos. La Iglesia de Andújar cuenta, desde el pasado domingo, de un servidor más, cuando tan necesitada se encuentra de personas dedicadas a la misión de hacer llegar la palabra del Evangelio de Jesucristo. Pasado el tiempo que el obispo de la Diócesis considere oportuno será investido Diácono Permanente.